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- Historia de una escalera, de Antonio Buero Vallejo
Posted by : Unknown
26 junio 2013
Podrás. Podrás... porque yo te lo pido. Tenemos que ser más fuertes que nuestros padres. Ellos se han dejado vencer por la vida. Han pasado treinta años subiendo y bajando esta escalera... Haciéndose cada día más mezquinos y más vulgares. Pero nosotros no nos dejaremos vencer por este ambiente. ¡No! Porque nos marcharemos de aquí. Nos apoyaremos el uno en el otro. Me ayudarás a subir, a dejar para siempre esta casa miserable estas broncas constantes, estas estrecheces. Me ayudarás, ¿verdad? Dime que sí, por favor. ¡Dímelo!
Título: Historia de una escalera
Autor: Antonio Buero Vallejo
Editorial: Espasa
Año de publicación: 1975
Páginas: 157
ISBN: 978-84-670-3328-1
Hoy vengo a hablaros del primer estreno de Antonio Buero Vallejo, viejo amigo el cual aún recuerdo cómo lo conocí. Me lo mandaron leer en el instituto, para examen de la asignatura de Lengua Castellana. Yo, que en aquella época pasaba bastante de los estudios, no tenía pensado hacerlo. ¿Para qué me iba a tomar la molestia, si ya sabía que estaba suspenso? En verano, si a caso me lo mandaban leer, haría el esfuerzo con tal de recuperar en septiembre. Pero mientras... ¿qué sentido tenía hacerlo? Vería esta pregunta resuelta al curso siguiente, cuando me ordenaron nuevamente leerlo. Y lectores, fue una grata sorpresa. Este, después de Luces de Bohemia del maestro Valle-Inclán, fue el segundo guión que más me ha emocionado. Y es que yo siempre fui reticente a este género.
Al sumergirme en sus páginas me encontré con una obra cumbre de la literatura española del siglo XX, una obra que, no en vano, valió a su autor el reconocimiento internacional y el premio Lope de Vega en el año 49
Sus personajes, todos ellos entrañables y maravillosos, en los cuales es imposible no reconocer a un conocido de nuestro entorno (si no a nosotros mismos) nos hacen ver treinta años de la modesta existencia de la pequeña comunidad en la que habitan. Protagonizan las intrigas de esta vetusta escalera cuatro familias: tres pobres y una pudiente. Su entorno y vicisitudes servirán al autor de metáfora de la España devastada tras la Guerra Civil; una España polvorienta en que la carestía es pan de cada día y en que los pocos que se esfuerzan por mejorar la situación ven truncados sus sueños, pisoteados por el prójimo envidioso, disconforme en su pellejo. Apostados en el rellano, seremos testigos mudos de una serie de hechos a través de los cuales Buero ejecutará un feroz análisis de las dificultades que ha de sortear el vulgo cada mañana para sobrevivir a un futuro incierto.
La obra está dividida en tres actos. El primero servirá de introducción y sus personajes se presentarán de una manera brillante, a través del recurso que es un impaciente cobrador del frac; el segundo y la primera mitad del tercero, desarrollarán el nudo; y a partir de la mitad del tercero, sentiremos el réquiem por las ilusiones que engendraron, optimistas, los personajes en su juventud y que sólo sirvieron para atormentarlos a lo largo de su vida. De acto a acto transcurren diez y veinte años, respectivamente.
Han pasado decenios desde que esta obra se publicara, sin embargo, los españoles no hemos cambiado en nada, o eso me parece a mí. Esta es la conclusión a la que llegué tras finiquitar esta obra. Algunos por falta de medios y otros porque no tienen voluntad. El caso es que muchas personas no evolucionan y se estancan sin remedio en un túnel oscuro, y se compadecen, y enloquecen, todo menos buscar la salida. Lectores, hemos vuelto a los viejos tiempos, a los malos tiempos en que Buro Vallejo vivió. El Mundo está loco y a nuestro alrededor todo es desastre. Historia de una escalera nos hace comprender que nada cambiará, que las cosas permanecerán estáticas hasta el fin. Sí. A no ser que hagamos algo, claro; que agarremos el toro por las astas. Que como Johnny, cojamos nuestro fusil. No literalmente, por supuesto.
Mi profesora acertó de mandándonos esta joya. Uno de esos libros que de jóvenes se disfruta más, de los que se aprende, aunque todos verán saciadas sus expectativas, pues importa poco la edad que tengan al apoderarse de él mientras en su corazón aún alberguen un ápice de rebeldía. Su lectura avivará esa llama, y los que, desgraciadamente, la tengan extinta, créanme, la verán prenderse con más ímpetu que en sus años de más actividad. Una obra tan española como El Quijote, tan motivadora como una canción de The Prodigy.
Señoras y señores, les dejo un libro atemporal lleno de símbolos por descubrir.
KFADFAD FAAH
ResponderEliminaradfaadfadf
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